El año de la recuperación

Por Joanisabel González

joanisabel.gonzalez@elnuevodia.com

La Junta de Planificación apuesta a que durante el año fiscal en curso, que incluye los primeros seis meses de este año, la economía de la Isla crecería en términos reales un 0.7%.

No obstante, el consenso de los economistas privados apunta a que, en términos fiscales, la economía local continuará en negativo y no será hasta la segunda mitad del 2012 en que se verá cierto respiro.

Esa modesta proyección favorable podría verse opacada si Puerto Rico no maneja certeramente los múltiples riesgos que inciden sobre su desempeño económico. En especial, si el entorno global en términos geopolíticos, financieros y económicos continúa la tendencia de deterioro y transformación que se hizo evidente en el 2011 con la crisis europea, la degradación de la deuda estadounidense y la sacudida a las estructuras del poder en el norte de África y el Oriente Medio.

De acuerdo con el catedrático en Economía en la Universidad de Puerto Rico en Mayagüez, José Alameda, en el 2012, la falta de recursos gubernamentales, con todo y la reducción del déficit presupuestario, continuará dando que hacer.

"Aunque el nivel de endeudamiento de Puerto Rico no supone una situación tan crítica como la de Grecia, nunca se había sobrepasado el 100% del producto nacional bruto (PNB)", indicó el economista.

Según Alameda, el nivel de deuda pública llega a niveles históricos al mismo tiempo en que Puerto Rico ya no dispone de capacidad prestataria suficiente en su mejor vehículo para tomar prestado: la Corporación para el Fondo de Interés Apremiante (Cofina), cuyos bonos son pagados con una tajada del impuesto al consumo (IVU).

Esa realidad, agregó, se convierte en un elemento de presión si se considera que las corporaciones públicas tampoco tienen recursos para hacer inversiones en obra pública.

"Lo que estoy viendo es que el Gobierno ha vuelto por los fueros. Se ha visto obligado a dejar la teoría republicana a un lado y ha comenzado a tratar de mover la obra pública. Hay 8,000 personas de nuevo en el Gobierno", dijo Alameda.

Sostuvo que la necesidad de obra pública es tal que incluso los municipios grandes han tenido que embarcarse en inversiones significativas para impulsar la actividad económica por sí mismos.

Agregó que la falta de recursos fiscales ya ha traído consigo consecuencias evidentes.

Destacó, por ejemplo, que el presupuesto conjunto de la Policía, el Departamento de Corrección y Rehabilitación y el...

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