Reina la creatividad
Por Ana Teresa Toro
ana.toro@elnuevodia.com
Joyería de materiales variados, trabajos en cuero y madera, bordados, serigrafías, pinturas, obras hechas en higüera y bambú, tallas de santos, cerámica, metales, en fin, diversidad de materiales y piezas al servicio del ingenio de las manos de creadores que durante meses trabajaron sin pausa para presentarle al público sus piezas durante los cuatro días de las Fiestas de la Calle San Sebastián que comenzaron ayer y se extenderán hasta el domingo.
Y es que, más allá de la controversia suscitada por el intento de las autoridades municipales de implementar nuevas medidas de seguridad durante el evento, no se debe olvidar que por encima de todo eso está el verdadero corazón de esta gran fiesta de pueblo: los artistas y la gente que sanamente llega hasta el Viejo San Juan a cantar, a bailar, a comprar sus artesanías y a disfrutar de la oferta cultural que ocupa el casco antiguo de nuestra capital durante estos cuatro días.
Ayer durante el día, ése era el espíritu. Desde temprano en la semana comenzaron a colocarse las carpas, a montarse las tarimas y a establecerse los kioscos. Ya ayer en la mañana el Cuartel de Ballajá se convirtió en una micro ciudad artesanal repleta de objetos y piezas cargadas de las historias humanas de cada uno de los creadores que las realizan. Se escuchaba música típica por todas partes interrumpida sólo por el sonido de las campanas de algún heladero o por el saludo afectuoso de dos amigos que se encuentran luego de tiempo sin verse. Porque una cosa sí es cierta, a la San Sebastián la gente viene a encontrarse, a verse año tras año y a celebrar cada cual por un motivo diferente.
La mayoría contaba que nunca se habían sentido del todo inseguros trabajando en las Fiestas de la Calle San Sebastián, aunque reconocieron que el tema de la entrada y la salida (con materiales y dinero) suele ser un inconveniente.
De ahí que muchos no tuvieran ningún reparo con los cambios en la seguridad, aunque ayer en la tarde a última hora el Tribunal paralizó los controvertibles registros propuestos por la alcaldesa Carmen Yulín Cruz.
Pero por encima de todo esto estaba la expectativa de un buen periodo de ventas y del encuentro con el público.
"Si el artesano trabaja siempre hay público que lo aprecie", comentaba Ñeca Negrón, quien a las ocho de la mañana ya comenzaba a montar su mesa. Lleva 20 años participando de las fiestas y llegó el día antes desde San Sebastián. Dormirá en casa de...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba