¿Educación remunerada?

JULIO E. FONTANET

DECANO DE LA FACULTAD DE DERECHO DE LA UNIVERSIDAD INTERAMERICANA Y EXPRESIDENTE DEL COLEGIO DE ABOGADOS

La premisa no articulada es que las universidades deben concentrarse en cursos que le produzcan una remuneración segura o significativa al estudiante. Ese egresado conseguirá trabajo prontamente -¡como si eso se pudiera garantizar en estos tiempos!- y ofrecerá un servicio útil y necesario para el país. Sostienen estas personas, además, que, para el desarrollo económico y la competitividad del país en los mercados mundiales, ésa debe ser la orientación de la educación.

Dicha postura menosprecia -por ignorancia, ausencia de reflexión o intereses creados- la importancia de las humanidades y las ciencias sociales en la formación personal y su insoslayable contribución al país.

Las universidades no existen meramente para la expedición de diplomas ni para la enseñanza de destrezas y competencias técnicas que garanticen un sustento. Parte de su responsabilidad -si no la más importante- consiste en la formación integral del ser humano, que incluye valores universales, ética y desarrollo de pensamiento crítico.

Las universidades tienen el deber ministerial de desarrollar, en los estudiantes de todas las disciplinas, sensibilidad y entendimiento de la naturaleza humana. Ello se logra con el estudio de la filosofía, la historia y las artes, lo que, a su vez, aporta a la calidad de vida, a la civilidad en las relaciones interpersonales (tanto familiares como comunitarias), a la tolerancia a las ideas y estilos de vida distintos, a formar seres humanos que no sean narcisistas ni insensibles a las necesidades de su prójimo, puesto que son conscientes de que son parte de una sociedad.

Un país compuesto por personas con ese desarrollo integral tiene más oportunidades de lograr estabilidad y capacidad para adecuarse a los tiempos. Hay mayores garantías, además, de un sistema de gobierno democrático y constitucional ya que existe la capacidad de deliberar y disentir de manera ilustrada. Pueblos compuestos de tecnócratas insensibles, que acatan el mandato de la autoridad sin cuestionamientos y cuyo valor fundamental es su propio enriquecimiento, tienen asegurado, más temprano que...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR