Júbilo en un retiro bien activo

Por Yaritza Santiago Caraballo

ysantiago1@elnuevodia.com

No es para menos, pues esta maestra se retiró temprano, dedica tiempo a viajar, a su familia, cuida su jardín, se ejercita y trabaja a tiempo parcial con niños autistas.

¿Su receta? La planificación. "Siempre visualicé retirarme joven, así que me preparé para el retiro y no me arrepiento de mi decisión", dijo Santos, jubilada en 2012 tras laborar durante 30 años en el Departamento de Educación.

Fungió por 17 años como maestra de educación especial y otros 13 como coordinadora del programa de autismo en la escuela María Inés Mendoza, en Bayamón, con un salario de $2,785 mensuales.

Santos explicó que, como no ha cumplido los 55 años, recibe de pensión el 65% de su sueldo, es decir, $1,700 mensuales. Pero asegura que vive cómoda, pues antes de retirarse limitó las deudas y saldó la hipoteca de su casa. Además, cuenta que tiene el apoyo económico de su esposo, además de su salario de $1,500 mensuales, pues...

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