REVERTIR EL PODER
por Ana Teresa Toro
ana.toro@elnuevodia.com
Desde su fundación en el 2005, Área: lugar de proyectos, en Caguas se propuso sostener un modelo de gestión cultural independiente bajo el mecenazgo del empresario José Hernández Castrodad y la gestión del artista Quintín Rivera Toro.
Irrumpieron con éxito y con el tiempo jóvenes artistas y gestores como Natalia Martínez y Abdiel Segarra asumieron de manera individual las riendas del espacio. Igualmente, se exploró con una dirección colectiva durante un período. Todos durante los pasados ocho años y medio en los que ha existido el espacio que ha acogido proyectos de manera ininterrumpida se han mantenido dentro de la misma línea: en Área nada se compra y nada se vende.
"Todas las instituciones están maniatadas por intereses particulares y eso es natural que ocurra, es parte del sistema. Me refiero a miembros de junta, a necesidades económicas, a agendas ideológicas personales. Un museo no puede, por ejemplo, abrir las puertas fácilmente sin tener un escrutinio sobre el contenido", expone el artista Quintín Rivera Toro, quien retoma las riendas del espacio tras varios años viviendo en la ciudad de Providence donde realizó una maestría en escultura en Rhode Island School of Design (RISD).
A su juicio la fórmula de Área como espacio alternativo ha sido exitosa por la constancia del auspicio privado de un filántropo de las artes. "Es una fórmula digna de ser observada porque en Puerto Rico hay muchísima gente de muchísimo dinero y todos tienen un interés particular. A José (Hernández Castrodad) le gustan las artes, pero hay otros a quienes les gusta la sinfónica, el ciclismo, la poesía", enfatiza el artista para quien parte del problema de la corta vida de muchos espacios alternativos para las artes tiene que ver con que "los artistas no somos buenos administradores, no somos buenos generadores de dinero pero tenemos mucha fuerza y mucho brío para producir el contenido dentro de estos espacios pero se necesita de una mente empresarial estable que tenga pasión por la disciplina que sea para que estos proyectos no sigan naciendo y muriendo".
La isla se está vaciando. Así leía un titular de ayer de este diario y cada día lo vamos confirmando. Todos tenemos algún conocido o familiar que se ha ido o está por hacerlo. Muy pocos regresan y a trabajar en un campo profesional tan complejo como las artes. A Rivera Toro muchos le dijeron que no lo hiciera.
"La primera contestación a por qué volver es por ser...
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