ROCKY VS. VERDEJO
Por José A. Sánchez Fournier
jose.sanchez@elnuevodia.com
Allí, callado y calmado, Rocky completaba sus ejercicios de calentamiento, previo a lo que sería su último guanteo para su combate con Burgos.
Su rival, el joven exolímpico Féliz Verdejo, no había llegado al gimnasio. "Con él estamos suave", aclaró el veterano púgil, explicando que el trabajo con el joven peleador es más para pulir coordinación que para desarrollar la ofensiva.
"Me ayuda a poder verle los movimientos de mano", explicó Rocky sobre Verdejo, quien al igual que Burgos es rápido de manos, espigado y escurridizo.
Verdejo llegó al gimnasio poco antes del mediodía. El visitante de Trujillo Alto arribó acompañado de su entrenador, Ricky Márquez. Lo primero que hizo Félix tras entrar fue saludar efusivamente al campeón local. Intercambiaron pocas palabras. Entonces el visitante comenzó una breve sesión de calistenia.
"Estamos mejor para esta pelea que para la de Miguel Beltrán, hijo", aseguró Papo.
Martínez venció por decisión a Beltrán el pasado 15 de septiembre en Las Vegas, reconquistando así el título 130 libras de la OMB.
Luego que Rocky y Félix terminaron sus rutinas de calentamiento, ambos comenzaron a ponerse los guantes, las copas y las caretas. El silencio en el gimnasio contrastaba con lo que estaba a punto de suceder allí. El único campeón mundial actual residente en Puerto Rico iba a intercambiar cuero con el púgil boricua que más brilló en las Olimpiadas de Londres, un potencial campeón mundial futuro y quien hizo su debut en el profesionalismo el 6 de diciembre pasado con un triunfo por decisión unánime sobre Leonardo Chávez.
"Son cuatro, ¿verdad?", Ricky le preguntó a Papo desde esquinas opuestas y mientras los púgiles subían al ring.
"Sí. Cuatro na' más", respondió el entrenador doradeño, en referencia al número de rounds que duraría el guanteo. El dúo chocó guantes y comenzó el encuentro. "¡Diablo! Ese muchacho es rapidísimo", dijo Martínez (26-1-1, 16 nocauts) sobre Verdejo, con quien ya había guanteado un puñado de ocasiones.
Sobre el ring, Rocky es conocido por su voluntad de hierro, por poner presión continua y nunca dar un paso atrás. Pero ante Verdejo salió boxeando en retroceso y quebrando mucha cintura. Era muestra de lo aprendido bajo Freddie Trinidad, el entrenador capitalino que le está instruyendo aspectos defensivos desde antes de su pelea con Beltrán.
Martínez también presionaba en ocasiones, buscando conectar abajo en combinaciones...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba