'La sátira no es una caricia'
Por Ana Teresa Toro
ana.toro@elnuevodia.com
"Los artistas siempre hemos sido parte del debate, nuestra tradición artística es profundamente política y muchos de nuestros artistas han sufrido las consecuencias de ese compromiso", afirma Martorell, quien anoche presentó ante un grupo de colegas y amigos el resultado de su más reciente exploración en materia de política, el "Bestiarium Politicum Portorricensis".
Lo hace por una razón muy clara: "a mí me importa el destino de mi país, que aún no lo es".
Hace unos meses en Ponce tuvimos un atisbo de lo que venía y hace un par de noches nos encontramos con Martorell en el restaurante de su hermano, Casa Martorell, para conocer el proyecto finalizado.
Se trata de un bestiario en el que nuestras principales figuras políticas del momento se entrelazan con el animal que, según el artista, mejor les represente; todo ello sobre un mapa de Puerto Rico en el que destaca nuestra flora, así como las aguas que nos rodean. Alrededor de toda la imagen, una frase se muerde la cola: "quo vadis status". (¿A dónde vas, status?) y cada figura lleva a su lado una versión, como se leería en latín, de sus nombres de bestias.
"Es un latín chapurreao, que no pretende ser un latín fidedigno porque no lo hablo, aunque fui cinco años monaguillo y rezaba y no sabía lo que decía, algo así como las divinas palabras que elevan a uno a alturas insospechadas sin uno saber lo que significan", describe mientras vamos viendo cómo el candidato a la gobernación Alejandro García Padilla se nos aparece en forma de gallo, el congresista Luis Gutiérrez se transforma en lagartijo, el gobernador Luis Fortuño en un pez pargo y la senadora María de Lourdes Santiago emerge como una jirafa.
Están ahí, mirándose, asechando el espacio. "No todos los inventé, me dejé llevar por la voz popular como es el caso del gato persa, el tiburón blanco o el manatí". Entonces la invitación es a jugar, a construir un todo a partir de estas imágenes.
"Soy hijo de la tradición, tanto del bestiario, que es una cosa medieval, y del mapa antiguo. También regreso al juego. Precisamente, ahora se cumplen 44 años de las Barajas Alacrán", describe el artista mientras nos va mostrando los distintos elementos que componen el proyecto.
Por un lado está una serie de 50 grabados de gran tamaño, a esto se suma otra serie más pequeña de piezas que consisten en acercamientos individuales a los personajes políticos y finalmente -y quizás el más importante-, el elemento...
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