Otro 'segundo chance'
Por Joel Ortiz Rivera
joel.ortiz@elnuevodia.com
La primera fue en noviembre, cuando tuvo una segunda oportunidad sobre su vida y se reunió con su familia en Puerto Rico tras cumplir 45 días de cárcel por violar una probatoria que se le impuso hace años en el estado de Nueva York por un caso de posesión de drogas.
La segunda será el último sábado de abril, cuando estelarice una cartelera en Caguas y busque retomar una carrera que quedó en el aire con su arresto en septiembre pasado, semanas después de su última pelea.
"Cogimos un descanso de unos meses para botar el golpe de la cárcel. Me mantuve entrenando de vez en cuando, botando esa inactividad", dijo el peleador, quien posee el título regional Fecarbox, afiliado al Consejo Mundial de Boxeo. "Pero gracias a Dios ya cumplí con todo y lo que resta es seguir adelante".
Robles, quien entrena en el gimnasio Pedro Rodríguez Gayá de Cataño, esperaba regresar a los cuadriláteros para el mes de febrero y entre sus planes también estaba cumplir el sueño de casarse con su compañera Erika Negrón. Ambas cosas siguen en curso, pero tuvieron que ser atrasadas unos meses.
Dijo que continúa en busca de un empleo y que durante los pasados meses han sido Erika y su equipo de trabajo -el manejador Carlos Soto y el entrenador Ángel Guevara- quienes "se han mantenido encima para que piense en mí y piense en mi futuro".
De las 160 libras que pesaba hace unos meses ya ha bajado 30, y Guevara lo mantiene corriendo en una pista de lunes a sábado, además de las sesiones diarias de trabajo de gimnasio.
Ya ha realizado sesiones de guanteo de entre ocho y 10 asaltos con peleadores como Jonathan Vidal y el prospecto Carlos Narváez, y el peleador que hace campaña en las 115 libras dice sentirse como nunca.
"Yo me he sentido hasta más veloz y tengo más boxeo. Para darme va a tener que ponerse espejuelos", dijo Robles refiriéndose a su rival, el carolinense Félix Pérez.
El combate Robles-Pérez será el principal de la cartelera Boxeo Boricua que presentará en vivo WAPA2 Deportes, la cual tendrá como sede la cancha Roger Mendoza de Caguas.
Robles admitió sentirse un poco incómodo con el hecho de que, luego de que tenía una carrera encaminada, tuvo que ponerles pausa a los sueños boxísticos que se había trazado.
"Pero era algo que tenía que cumplir y tenía que salir de eso. Soy un hombrecito y tuve que confrontar los errores que cometí", afirmó con tranquilidad.
Tras batallar legalmente...
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