Con el sello de la puertorriqueñidad

POR DAMARIS HERNÁNDEZ MERCADO

dhernandez1@elnuevodia.com

Medio siglo después aún defiende su decisión con la misma vehemencia que en el 1962.

En la década del 1960, cuando comenzó a cocinarse ese género que hoy llamamos salsa, cuando en Nueva York el imperio del sello Fania marcaba los trazos que delineaban una historia en la música con la comercialización del incipiente género, los "Mulatos del Sabor" buscaban su sitial como una agrupación netamente puertorriqueña.

Por esa razón, Ithier nunca quiso grabar con un conglomerado musical, por lo que Fania jamás estuvo contemplado en el panorama de la orquesta. Además, y según ha expresado el propio director, "en El Gran Combo no hay estrellas, todos son El Gran Combo". Así explica por qué la orquesta nunca ha grabado o grabará con otro exponente salsero.

"Sencillamente, El Gran Combo se quiere mantener puro. Al que le gusta El Gran Combo le gusta con los cantantes que son y los músicos que somos", expresó Ithier.

"Ithier, por su ideología, ha protegido y defendido la identidad. Ese sentimiento de que fuese una agrupación de Puerto Rico, compuesta por puertorriqueños con el elemento muy particular que tiene que ver con la negritud definida desde la...

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