SINTONÍA ABSOLUTA
Por Ana Teresa Toro
ana.toro@elnuevodia.com
Llegaron a San Juan por primera vez el pasado lunes en la tarde como invitados de Ballet Concierto de Puerto Rico (BCPR) para protagonizar El lago de los cisnes, que sube a escena mañana en la sala Antonio Paoli del Centro de Bellas Artes Luis A. Ferré. Ya el martes en la mañana se encontraban en la sede de la institución artística en Santurce, listos para ensayar.
Recientemente, Carlos Cabrera, director artístico de BCPR viajó con algunos integrantes de la compañía a Cuba para participar del Festival Internacional de Ballet de La Habana. Igualmente, la presencia en Puerto Rico del bailarín cubano Víctor Gilí, quien fungiera durante años como primer bailarín del Ballet Nacional de Cuba y hoy día es maestro en nuestra tierra, ha sido clave para continuar afianzando las relaciones entre esta compañía y los bailarines cubanos.
"Víctor Gilí y yo bailamos juntos Giselle, El lago de los cisnes... De ahí viene una gran amistad y un respeto por el trabajo", comentó Valdés, una estrella internacional que se ha presentado en los principales escenarios del mundo y quien desde el 2001 es la primera bailarina del Ballet Nacional de Cuba.
"Víctor ha sido mi maestro y esto es algo que estamos esperando hace mucho tiempo. Estamos muy emocionados", dijo por su parte Gounod, un joven virtuoso quien con esta puesta en escena regresa a los escenarios luego de cinco meses fuera del ballet debido a una lesión.
Para estas funciones, ambos bailarines ensayaron en La Habana con vídeos -de las caracterizaciones de Carlos Acosta y Lorna Feijóo- que les enviaron desde aquí, pues debían aprender una versión distinta a la cubana, principalmente el primer y el cuarto acto.
"Hay frases musicales que no teníamos en nuestra versión. Aunque mantendremos las variaciones y el pas de deux de la versión cubana el resto lo vamos a adaptar a la versión de aquí", explicó Valdés, toda vez que celebró ese cruce de ideas entre instituciones.
"Nos sentimos muy bien porque la idiosincrasia puertorriqueña es muy parecida a la nuestra", abonó Gounod acerca de los obvios lazos culturales que nos hermanan.
"Tenemos ese mismo sentido de la musicalidad, el ritmo que llevamos en la sangre. Somos muy extrovertidos y eso se nota en el baile, en la manera en que nos expresamos en el escenario", añade Valdés.
Hablan y estiran las piernas, mueven los dedos y los pies con insistencia. Se nota que están listos ya para empezar a reencontrarse con este...
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