El sistema escolar y su nueva ruta
En cada barrio es un secreto a voces. Todos saben cuáles son las escuelas de excelencia, aquellas donde los niños son retados y aquellas que en las conversaciones entre padres se advierten, “no mandes a los nenes ahí”.
La madeja de procesos burocráticos que dominan las operaciones del Departamento de Educación ha impedido, por años, que se identifiquen adecuadamente o se tomen medidas para que las escuelas que presentan un bajo desempeño académico reciban las ayudas que necesitan. Este es precisamente uno de los problemas que la agencia quiere erradicar con la implantación total de un plan que se ha estado trabajando desde 2016 y que el Departamento de Educación federal finalmente aprobó el miércoles.
De esta manera, Puerto Rico ya tiene listo el plan para cumplir con los lineamientos de la ley federal Every Student Succeeds (ESSA, por sus siglas en inglés), un estatuto federal aprobado en 2015 para reformar el sistema educativo. ESSA sustituyó la antigua ley educativa No Child Left Behind (NCLB, por sus siglas en inglés), que no cumplió con sus ambiciosas metas para cerrar las brechas académicas entre los estudiantes de trasfondos minoritarios.
A través de ESSA, el gobierno federal le dio más poder a los estados para determinar los criterios que se usarán para evaluar las escuelas, las medidas que se tomarán para ayudar a las que no cumplan con las metas y los instrumentos pedagógicos que se usarán en los salones de clases.
De esta forma, donde NCLB establecía metas fijas para todos los estudiantes para cada año académico, ESSA permite que cada agencia educativa estatal (SEA, por sus siglas en inglés) fije sus propios objetivos y el período en que se deben cumplir. Mientras NCLB obligaba que ciertas partidas de los fondos federales asignados a cada jurisdicción se utilizaran para proyectos específicos, con ESSA cada agencia educativa local (LEA, por sus siglas en inglés) podrá escoger los proyectos que mejor atienden las necesidades de cada escuela, explicó la secretaria de Educación, Julia Keleher.
Las metas para Puerto Rico ya están trazadas. En promedio, se espera que el 70% de los estudiantes dominen las destrezas medidas en las pruebas estandarizadas para 2022, precisó la secretaria.
Actualmente, el nivel de proficiencia ronda un 40%, por lo que el plan requiere que los alumnos evidencien un progreso académico de cerca de un 10% anual por los próximos cuatro años, señaló Keleher.
“El plan busca que tengamos metas que sean reales, que...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba