Surgen incongruencias en el juicio a la mucama

Por Cynthia López Cabán

cynthia.lopez@gfrmedia.com

En el segundo día del proceso criminal, que preside la jueza Eloína Torres Cancel del Tribunal de San Juan, el guardia de seguridad del condominio Laguna Terrace del Condado, Oreste Navarro Soler, entró en contradicciones para establecer la hora en que Irizarry Yunqué llegó al edificio la tarde del 17 de agosto.

El exjuez, contra quien la defensa de la empleada doméstica enfiló sus cañones para vincularlo al crimen, descubrió el cuerpo ensangrentado de su esposa al llegar al hogar luego de pasar la tarde fuera del apartamento.

En su testimonio directo a la fiscal Elba Acevedo Pérez, Navarro Soler indicó que Irizarry Yunqué llegó al condominio como a las 5:00 p.m. Rememoró que esa tarde el octagenario detuvo su guagua frente a la caseta de seguridad a la entrada del condominio y le puso un tango de Carlos Gardel. Luego continuó el paso cuando otro carro llegó al lugar.

Pero, confrontado por la licenciada Lucille Borges Capó con una declaración que ofreció a un agente de la Policía que lo entrevistó en el condominio la noche del 17 de agosto, el guardia de seguridad no recordó que en esa entrevista indicó que había visto llegar al exjuez alrededor de las 3:00 p.m.

"No recuerdo haber dicho eso", afirmó el guardia ante un jurado que escuchaba atento su testimonio.

Sin embargo, el...

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