Y tú, ¿eres tecno-adict@?

Por Karen Lee Torres Dávila

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Si tienes un Android, BlackBerry o iPhone, míralo: muy probablemente su luz esté parpadeando o mostrándote un icono que te anuncia que tienes un mensaje, un correo, una invitación de Facebook o Twitter, tal vez una llamada perdida. ¡Eso se siente bien! Hay que aceptarlo: es terrible cuando tomas tu teléfono después de mucho tiempo y nadie te ha buscado.

Es tan terrible que los que constantemente revisan quién los está llamando, texteando o buscando bromean diciendo que son adictos a sus celulares. A fin de cuentas el celular es para usarse, ¿no? Pero la broma de decir que son incapaces de dejar el celular por un segundo ya no es graciosa, sino real.

El uso prolongado de los celulares puede llevar a desarrollar una adicción que puede ser tan peligrosa como cualquier otra.

Para muchos, el uso de su smartphone y sus aplicaciones tiene efectos en la autoestima, producen dependencia, ansiedad, estrés y muy posiblemente todo esto desencadene en otras adicciones, según lo aseguran las estadísticas de desórdenes mentales.

Generalmente, los poseedores de smartphones (ej. Android, BlackBerry, iPhone) están constantemente muy pendientes de todo lo que su celular puede hacer y sienten ansiedad por descargar cada vez más aplicaciones, sólo por tenerlas.

Por otra...

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