Termina el escrutinio

El escrutinio general del plebiscito de status acabó ayer inmerso en una nube de interrogantes debido a un intento de adjudicar papeletas perdidas y de votos añadidos a mano.

Los portavoces alternos del Partido Popular Democrático (PPD), Karla Angleró, y del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), Adrián González, confirmaron a El Nuevo Día que en la tarde de ayer acabó el recuento de votos del llamado “Plebiscito para la Descolonización Inmediata de Puerto Rico”, celebrado el pasado 11 de junio pasado.

Pero ninguno de los representantes de ambos partidos firmó una certificación oficial para permitir contabilizar seis actas de votación revisadas porque faltaban por escrutar 777 papeletas de seis colegios de votación -tres de Bayamón y tres de Toa Baja- que desaparecieron luego de la consulta.

Este diario intentó contactar a la comisionada electoral del Partido Nuevo Progresista, Norma Burgos, en múltiples ocasiones, pero no recibió respuesta.

Angleró y González explicaron que el día del plebiscito la Oficina de Sistema de Información y Procesamiento Electrónico de la Comisión Estatal de Elecciones (CEE) recibió las actas de trasmisión con los resultados de los seis colegios, pero que las papeletas desaparecieron sin que exista una querella o se haya iniciado una investigación para explicar qué ocurrió con esos sufragios.

Pese a esta situación, el director de escrutinio, César Vázquez, realizó sin éxito un referéndum entre los tres comisionados electorales a través de la aplicación de WhatsApp para adjudicar las actas sin las papeletas, la lista de electores y los otros documentos que forman parte del maletín.

Ante el desacuerdo, la presidenta interina de la CEE, María Santiago, ordenó que se cuenten “utilizando las actas de esa noche”.

Santiago indica, en una resolución, que la urna electrónica hace una fotografía de cada una de las papapeletas y que la almacena en la memoria de la máquina en formato de PDF.

“Aun sin la existencia física de las papeletas... hay una foto exacta de cada una de ellas”, indica la resolución que Santiago emitió anoche.

Pero el asunto de las papeletas perdidas no es el único nubarrón que empañó el escrutinio.

El PIP y el PPD han denunciado que aparecieron tres menores de edad votando en la consulta y que no cuadraban las papeletas con el número de electores de los colegios.

Resaltaron el alto número de votantes añadidos a mano fuera de su precinto y la decisión de los funcionarios de no retener la tarjeta...

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