EL TESORO ''ENTERRADO''
POR eugenio hopgood
eugenio.hopgood@gfrmedia.com
Auna década de la salida de la Marina, Vieques pisa y no arranca. A pesar de los planes, múltiples factores han dado al traste con el potencial de desarrollo y mantienen a la isla en un lamentable estancamiento. El remedio para el subdesarrollo en que se encuentra el municipio se oculta en su "suelo" y se desperdicia entre la especulación del valor, las ventas ilegales y la falta de estadísticas y la evasión contributiva.
En los años 40, más de 800 familias fueron expropiadas por los militares. Desde entonces hasta 2001, la Marina ocupó más de dos tercios del territorio, mientras sus residentes vivían cercados en 10,000 cuerdas.
En mayo de 2001, el cuerpo militar traspasó 4,200 cuerdas al municipio, otras 3,192 al Departamento federal del Interior (DI) para uso del Servicio federal de Pesca y Vida Silvestre (USFWS, en inglés). Al Fideicomiso de Conservación, organización no gubernamental, le entregaron 830. En 2003, la Marina salió de Vieques y traspasó 15,106 cuerdas del este al DI para un refugio de vida silvestre. Además, debía costear la limpieza ambiental. Hay 10,000 cuerdas todavía en proceso de descontaminación.
En 2003, se creyó que los residentes tendrían progresos sustanciales en calidad de vida. Pero el esperado desarrollo se ha convertido en la gran promesa incumplida, a pesar del diseño de un plan maestro para el desarrollo sustentable de Vieques y Culebra, y de planes de áreas con sus propuestas específicas por zona. También se creó un grupo interagencial para "dar impulso al desarrollo sustentable en Vieques y Culebra", según José Rivera Santana, planificador a cargo del diseño del plan maestro.
Los terrenos eran la base que sostendría la promesa de desarrollo. En general, se promovían ampliaciones de propiedades existentes para hacer hospederías de pequeña escala y otros modelos de pequeños negocios, pero "no se descartaban desarrollos turísticos intermedios y que las organizaciones comunitaria hicieran alianzas con empresarios", recordó Rivera Santana.
Vieques muestra un crecimiento en el reglón de los hostales, pero todavía hoy se ven con recelo las inversiones en proyectos intermedios o grandes, porque los asocian con falta de sustentabilidad ambiental. Al amparo de ese resquemor, creció el inmovilismo y se neutralizó la efervescencia de la esperada inversión. Vieques obtuvo sus tierras de vuelta, pero no supo qué hacer con ellas.
También se propuso desarrollar agricultura...
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