Tijera masiva en las fuerzas policiacas

Por Daniel Rivera Vargas

drivera2@elnuevodia.com

La causa de la merma son las ventanas de retiro de la Ley 70, un estatuto de la administración del exgobernador Luis Fortuño que comenzó a aplicar en el 2010 para generar economías fiscales incentivando la salida temprana de empleados en más de 100 agencias.

De 2010 al presente, a esos beneficios de retiro temprano se han acogido 6,932 trabajadores en todo el Gobierno, de acuerdo con la Oficina de Gerencia y Presupuesto (OGP).

La inmensa mayoría -más del 30%- pertenecía a la Policía.

Y entre los 2,111 retirados de la Policía, 1,807 eran agentes del orden público, precisó la Uniformada.

Es probable que esta cifra aumente, ya que hay solicitudes de retiro que aún están bajo evaluación, dado que la sexta ventana de la Ley 70 estuvo vigente hasta el 14 de diciembre pasado.

Hasta el pasado viernes la Policía tenía 16,411 oficiales, no todos ellos activos. Esta cifra incluye a los agentes que están acogidos a alguna licencia o tratamiento a través de la Corporación para el Fondo del Seguro del Estado.

El retiro de 2,111 policías es particularmente relevante en un país en el que al año se cometen alrededor de 60,000 delitos Tipo I. El 2010 y 2011 fueron los años con más asesinatos en Puerto Rico: 1,017 y 1,164, respectivamente.

"Tiene un efecto, en algunas áreas, detrimental", sentenció el superintendente Héctor Pesquera.

"Se pierde la experiencia. Obviamente yo no quisiera que se perdiera, pero si la persona quiere acogerse, y esto fue un beneficio que se dio antes de yo llegar, pues sería discriminatorio no permitirle irse", expresó el jefe policiaco.

La Ley 70 fue especialmente atractiva para oficiales con experiencia porque permitía a aquellos de más de 15 años de servicio retirarse con la mitad de su pensión.

Entre las funciones policiacas más afectadas están las de patrullaje preventivo y las relacionadas con labores de investigación, coincidieron los entrevistados.

"Esto fue un rudo golpe a la Policía", expresó Diego Figueroa, del Frente Unido de Policías Organizados (FUPO). "Salen de personas con experiencia, con confidentes en la calle, que conocen su área geográfica", añadió Figueroa.

"Esto es un país de alta incidencia criminal, todos los días llueven las querellas. Si antes una querella se tardaba tres horas en atenderse, ahora tardará más", dijo Jaime Morales, de la Corporación Organizada de Policías y Seguridad (COPS).

El tercero al mando en la región de Aibonito, el capitán Rubén...

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