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Por Javier Colón Dávila

jcolon@elnuevodia.com

La última vez que Miriam Ramos Colón fue vista con vida compraba en una gasolinera de Yauco un envase para echar el flamable líquido. Lo llenó y se marchó caminando.

A las pocas horas del mismo 10 de septiembre de 2008 su cuerpo fue encontrado desmembrado y parcialmente quemado en una playa del mismo municipio. Un día antes había sido reportada desaparecida.

Inicialmente se trabajó el caso como un posible suicidio, teoría descartada por la investigación forense. Casi tres años más tarde el asesino de Ramos Colón no ha sido encontrado.

Ramos Colón, quien al morir tenía 47 años, era una conocida y polifacética activista del Partido Nuevo Progresista en su municipio de Guayanilla, donde trabajó como asambleísta municipal entre 1996 y el 2000. Tenía licencia para portar armas -nunca adquirió una-, tenía créditos en Derecho, licencia de detective privado y se desempeñó por dos años como administadora del residencial Padro Nazario, donde también vivía.

"Ella no se pudo haber autinfligido estas quemaduras. Si una persona, por más deseo que tenga de suicidiarse... si fuera a inmolarse va a correr para un sitio a buscar ayuda", dijo el agente investigador, Gaspar Sánchez.

El cuerpo de Ramos Colón, quien no poseía ni manejaba autos, fue encontrado en la tarde monte adentro, a unos 125 pies de una carretera y a 30 minutos en auto de la gasolinera. Todavía olía a quemado. Las pertenencias de la mujer como dinero en efectivo e identificaciones fueron colocadas de forma organizada cerca del cuerpo. La teoría de un rito de santería descartó, al igual que la posibilidad de que perrors hambrientos arrancaran las piernas.

"El fuego se concentró en el área vaginal.... ese fuego lo fueron alimentando", dijo Sánchez quien teoriza que el fuego se inició en dicha parte del cuerpo para "borrar alguna evidencia".

Cerca del cuerpo, que no presentaba heridas o golpes, se encontró un encendedor como el que se utiliza para prender barbacoas, unas chancletas y un plástico que podría corresponder al envase en que transportaba gasolina.

El agente Sánchez no quiso utilizar la palabra "detenida" al hablar de una...

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