Todo un arte el suplido de agua
Debajo del antiguo Hospital de la Concepción, en el Viejo San Juan, se esconde una historia líquida. Allí sobreviven varios aljibes que en la época colonial funcionaban para suplirle agua a la población sanjuanera.
Con el paso del tiempo estos depósitos, donde se almacenaba agua de lluvia, cayeron en desuso, y se utilizaron para otros propósitos. Hoy, ante la emergencia que vive el país tras el azote del huracán María, este antiguo sistema se ha destapado para suplir agua a los estudiantes de la Escuela de Artes Plásticas y Diseño (EAPD), así como a la comunidad sanjuanera.
La iniciativa surgió por parte de la institución educativa, pues uno de sus dos edificios es precisamente el antiguo Hospital de la Concepción. Desde el paso del ciclón, la universidad no cuenta con servicio de agua potable. Y aunque tiene una cisterna de 1,700 galones, esta se encuentra en uno de los aljibes a unos 20 pies de profundidad. Como la institución no tiene luz y no cuenta con generadores que puedan bombear el agua, la misma no se podía usar.
Ante esta situación, la decana de asuntos académicos y estudiantiles, la profesora Tere López, se comunicó con la artista Maritza González Cintrón, fundadora de la organización sin fines de lucro Creando conciencia mi tierra grita, quien trajo al país un sistema de filtración de agua manual a través de Veterans for Puerto Rico.
“No tenemos agua ni potable ni de ningún tipo, así que los contactamos a ellos (la organización), quienes rápido presentaron lo que necesitaban y le dimos el superapoyo. La idea no es solamente que le sirvan agua a la población universitaria, sino a la comunidad sanjuanera, sobre todo a la comunidad de La Perla que todavía no tiene agua”, explicó López.
Para llevar a cabo la filtración del agua se realizó ayer un proceso para el que se conectó una manga desde la cisterna hasta un depósito de 250 galones que se ubicó en el patio interior del edificio. Con unas bombas manuales se fue recolectando el agua, la cual luego se limpió, filtró, y se repartió en envases provistos por la entidad.
“Nos tomó como dos semanas organizar este esfuerzo y traer este sistema, pero valió la pena”, dijo González Cintrón, líder de la entidad.
“La intención es que un día a la semana podamos llevar a cabo este tipo de actividad para que los estudiantes se puedan llevar agua”, agregó la mujer, quien es oficial de comunicaciones de la Asociación de Artistas Plásticos de Puerto Rico, que también se unió a este esfuerzo.
...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba