Total dominio de Pacquiao

Por José A. Sánchez Fournier

jose.sanchez@elnuevodia.com

El juez Michael Pernick votó 120-108. Lisa Giampa entregó tarjeta de 119-109. Manfred Kuechler la tabuló 118-110. La cartelera fue transmitida en vivo por el sistema 'pague para ver' de la telecadena HBO.

"Trataba de hacer una buena pelea. Y si el nocaut llegaba, pues llegaba. Pero traté. Traté de ponerle fin a la pelea, pero mi oponente es un tipo muy duro. Tengo que darle crédito por eso", dijo tras la pelea Pacquiao (55-5-2, 38 nocauts).

Fue su primera pelea desde que Juan Manuel Marquez lo noqueó en seis asaltos el ocho de diciembre del año pasado en Las Vegas y su primer triunfo desde que venció vía controversial decisión al mexicano el 12 de noviembre de 2011 en esa misma ciudad.

La velocidad de Pacquiao fue la diferencia desde el primer asalto. Aunque durante el round inicial el filipino no estaba a su distancia óptima, mantenía ocupado a Ríos con ráfagas y movimiento.

El californiano mantenía la guardia alta y buscaba acortar la distancia para pillar al filipino en el cuerpo a cuerpo. No tenía éxito. En un agarre, Ríos pegó cinco buenas derechas cortas, pero poco más en el capítulo.

Manny cerró la vuelta conectando en los planos bajos. Repitió la dosis al inicio del segundo y Brandon respondió retrocediendo y doblándose un poco. Poco después, tras recibir castigo en el rostro, Ríos (31-2-1, 23 nocauts) gesticuló con los guantes, invitando a que su contrario siguiera pegándole.

"Esto es parte del boxeo. Manny hizo un buen trabajo. Es un peleador muy rápido, pero en términos de pegada no lo sentí mucho. Pero tiene rapidez. Eso fue todo. Aparte de eso, me sentí bien en la pelea", dijo Ríos tras ser vencido.

Manny trabajaba a un ritmo más lento de lo usual para él, aunque se movía bien por el cuadrilátero.

Ríos tuvo dificultad para llegarle al filipino, pero en el tercero acertó dos buenas manos zurdas cuando Manny iba en reversa. El filipino se fue a las cuerdas. Ríos lo persiguió tirando, pero Manny lo paró en seco con una izquierda volada.

Pacquiao controlaba la pelea pero no se arriesgaba como antes de su derrota por nocaut. Agarró a su rival más que antes, y en esos instantes fue cuando Ríos pegó buenos golpes.

En los 30 segundos finales del quinto el filipino acertó una veloz andanada de cinco golpes al rostro, pero no llevaban su potencia usual.

Lo intentó de nuevo cuando quedaban 40 segundos restando en el...

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