Transformado Albert Pujols

Por Carlos Rosa Rosa

crosa@elnuevodia.com

En el tiempo muerto, el estelar primera base cambia de uniforme; deja a un lado el de béisbol y se coloca el de misionero.

A través de su Fundación Familia Pujols, el quisqueyano ha logrado colaborar con un sinnúmero de organizaciones relacionadas a la condición de síndrome de Down en San Luis, a la vez que anualmente visita su país y ofrece clínicas médicas en diversas comunidades.

Es un llamado que él siente de parte de Dios y lo hace con mucha devoción.

"Hace tres semanas hicimos un viaje a Dominicana y llevé 23 doctores para una actividad. Es el octavo viaje misionero que hacemos", precisó Pujols.

"Dios me ha dado el don y la responsabilidad de ayudar a otros. Nunca me he olvidado de mi país. Asimismo como ayudo a comunidades y organizaciones en San Luis, también ayudo a mi país", continuó Pujols, cuya hija Isabella fue diagnosticada con síndrome de Down.

La vida de Pujols tomó otro giro a los 20 años de edad. Contó que un encuentro con el amor de Dios cambió su corazón. Y trata de ofrecer el ejemplo fuera del terreno.

"Hace 13 años le entregué mi vida a Dios y me transformó. Él me ha llevado a un nivel que nunca imaginé que iba a alcanzar. Y me ha dado esta oportunidad de llegar a las Grandes Ligas no solo para dar palos...

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