El último de una gran generación

Por Ana Teresa Toro

ana.toro@elnuevodia.com

"El baúl era símbolo de que alguien iba a viajar. Y el único que quedaba en la casa era yo. Supe enseguida que me mandarían a Francia".

Así comenzó la travesía musical que llevó al más pequeño de los Figueroa Sanabia a seguir los pasos de sus hermanos como estudiantes de la Escuela Normal de Música (École Normale de Musique) en París. Así lo contó en el 2007 y tras cumplir noventa años a la periodista Mayra Montero, quien le realizó la última entrevista al más pequeño del irrepetible clan de hermanos que tanto influyó en el desarrollo de una cultura musical sólida en la Isla.

Esa travesía completó un contundente ciclo ayer al mediodía, con el fallecimiento de Rafael Figueroa Sanabia, a sus 94 años. Murió en el Hogar Brisas del Condado debido a padecimientos cardíacos y pulmonares. Sus restos serán velados en la Funeraria Buxeda y más adelante la familia ofrecerá detalles con relación al sepelio.

Con su muerte se despide una generación completa de músicos puertorriqueños que no solo se unieron por el inevitable lazo de la sangre, sino por una pasión musical que vieron florecer en familia. Así nació el Quinteto de los hermanos Figueroa que estuvo compuesto por José y Kachiro (violines), Guillermo (viola), Rafael (cello) y Narciso (piano). Sus padres, Jesús Figueroa (clarinete, compositor y director de orquesta) y Carmen Sanabia (pianista), fueron incentivo e inspiración para el desarrollo de estos grandes de la tradición musical del País.

El Quinteto Figueroa quedó definitivamente formado y establecido en 1935 en la ciudad de París, donde José ejercía las funciones de maestro de violín en la École Normale de Musique, y sus hermanos completaban sus estudios avanzados de ejecución en sus respectivos instrumentos. Allí recibieron la sapiencia y el apoyo de maestros como Jacques Thibaud, Alfred Cortot, Nadia Boulanger, Dirán Alexanian, George Enesco, Pierre Fournier, Isidor Philipp, Marcel Dupré, Maurice Vieux, Roger Cortet, Ninon Vallin, Oliver Messian, Charles Muench, Wanda Landowska, Joaquín Turina y Manuel de Falla, entre otros.

El inicio de la Segunda Guerrra Mundial les hizo regresar y el 1 de septiembre de 1939 hicieron su debut en el País en el Casino de Puerto Rico. Desde entonces sus estrechos vínculos con la educación y el desarrollo de una cultura musical más sólida fueron dos aspectos que siempre acompañaron a los apellidos Figueroa Sanabia.

"No sé qué decir, es un momento muy triste, pero...

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