En el umbral de quedarnos fuera del partido

Por Joanisabel González

joanisabel.gonzalez@elnuevodia.com

Para el ciudadano de a pie, ese mensaje sirvió para concluir que estamos al bate en la séptima entrada del partido, que no hay "outs" y, al menos, con un hombre, en primera. Nada más lejos de la verdad.

La degradación a la deuda de la Isla por parte de Moody's, y la advertencia solapada de Standard y Poor's hace unos meses, ha vuelto a estremecer la torre de naipes sobre la que se ha construido un Puerto Rico, a son de tomar prestado y de aprobar programas hoy, para que la administración siguiente busque otro mecanismo para que el pueblo pague por lo gastado. En otro tiempo, fueron las corporaciones públicas; a finales de siglo, la deuda extraconstitucional; y ahora, los bonos Cofina pagaderos con el IVU.

La desgracia es que el País reacciona otra vez porque un tercero externo -Moody's- ha vuelto a soplar la torre de naipes y no porque, después de tanto susto, se hayan adoptado metodologías y parámetros de medición que cambien la forma en que se hace política pública.

Así las cosas, nadie en Puerto Rico debiera perderle el rastro al debate que se iniciará en las próximas semanas acerca de la Administración de los Sistemas de Retiro (ASR), especialmente por dos razones. En primer lugar, la precaria situación de los planes de pensiones gubernamentales no dan espacio para los parches. Y en segundo lugar, para resolver el lío de la ASR y de otros planes de pensión, los políticos que aprobaron bonos de Navidad y verano a los jubilados, los que permitieron que un alcalde reciba una pensión vitalicia por trabajar dos o tres cuatrienios y los que modificaron las leyes para que ciertos cónyuges reciban pensión, bondades a las que no se asignó un centavo, son los mismos que van a utilizar su bolsillo para cuadrar esa caja.

Tenga a mano los números y apréndalos de memoria. Según el informe actuarial, la ASR tenía una obligación actuarial de $ 19,501 millones, pero tenía $ 1,667 millones para honrar las obligaciones contraídas. Al 2010, el promedio mensual del pago a 77,528 jubilados era $ 1,037; el pago que reciben otros 16,839 incapacitados rondaba unos $ 438 y los beneficiarios de pensionados, que rondan 12,171, reciben otros $ 275.

En el caso del Sistema de Retiro para Maestros (SRM), al 2010, su obligación actuarial rondaba $ 9,279 millones, pero solo contaba con unos $ 2,221 millones...

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