V ive Tranquilo

Por Marcos Billy Guzmán

Especial El Nuevo Día

Por décadas se dedicó a convertir a adolescentes en estrellas y a desarrollar uno de los boy bands más famosos de la cultura popular.

A meses de haber regresado al ojo público, Edgardo Díaz habla de su fórmula exitosa, sus posturas como evaluador de uno de los reality shows más populares hoy en Puerto Rico y hasta de las alegaciones de maltrato que por años le han perseguido como creador del grupo Menudo.

De entrada, el productor habla del profesionalismo de los participantes de "Idol Kids", que Wapa TV emite los domingos. "Me maravillo cada vez que los veo tan chiquitos, pero tan grandes en tarima. No sé cómo se paran allí con tanta seguridad", expresa. "Mi experiencia en el show ha sido extremadamente positiva. Este país es algo maravilloso".

Su asombro lo analiza recordando el tiempo que lleva desarrollando talento joven. "Son fácil treinta y pico de años, pues empecé de adolescente", enfatiza. También piensa en el receso que se tomó tras sus labores con MDO y luego el grupo Tick Tock a mediados del 2000. Entonces sentía algo de frustración.

"Llegó un momento en que la situación de las disqueras se complicó y la industria. Me causó decepción porque sabes que hay un potencial", señala.

En su regreso, Díaz ha vuelto a ver críticas en la escena, aunque no le asombran. Una de ellas va dirigida al sistema de votación de "Idol Kids", que muchos han tildado de injusto por entender que hay desventaja mientras el público puede votar por los participantes desde el primero que canta en el show. Aunque aclara que ese asunto recae sobre la producción, su comentario sobre el tema es directo.

"Participé en un reality en México en la última etapa de MDO y recuerdo un comentario que les hice a los muchachos. Les dije: 'Vinimos aquí y estamos participando de este juego'. Nosotros no podemos mañana enojarnos porque no nos gustó que votaron así o decidieron tal cosa... Nosotros aceptamos las reglas del juego y se acabó. Si no estás de acuerdo, pues no entres", considera.

En lo que admite haber discrepado es con la forma en que sus compañeros a veces evalúan a los cantantes del programa. Y es que se niega a darles falsas esperanzas a los niños.

"Trato de dejar la emoción a un lado. Inclusive he discutido con mis compañeros jurados porque les digo que no pueden ser tan emocionales. Cuando me anunciaron del show, lo primero que me preocupó fue el trato que les iban a dar (a los participantes), pero no creo que le...

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