El valle de los dinosaurios

GDA / Uruguay

La cuestión es que el territorio uruguayo, el argentino y el brasileño, formaban parte de un grandioso jardín vibrante de vida donde reinaban los gigantescos saurios pesando hasta 100 toneladas y consumiendo unas cuatro de comida por día. Los dinosaurios se tiraban unos pedos descomunales, capaces de desmayar al Tiranosauro Rex más próximo. Consecuentemente, estos animalitos descomunales liberaban tanto metano que redujeron la capa de ozono, lo cual terminó con la vegetación y también con ellos.

Es que esta región brasileña es rica en vestigios del Jurásico, de los primeros mamíferos y sitios con pinturas rupestres de hasta 10,000 años.

En Uruguay aparecen fósiles por todos lados siempre que haya alguien capaz de identificarlos, aún cuando son de pequeña dimensión. Porque mirá que hubo dinosaurios de todas las tallas. En Argentina están algunos de los sitios arqueológicos más prometedores de todo el mundo. Brasil, claro con ese tamaño tiene de todo. Pero además, tiene gente que sabe aprovechar los recursos naturales y de esa manera protegerlos contra la ignorancia y la depreda ción.

El Valle de los Dinosaurios fue tallado por el Rio do Peixe, que hoy no parece tan caudaloso, pero que entre 65 y 250 millones de años atrás, hervía de vida tan distinta a la de ahora que capaz que hasta había justicia social. Las lluvias sacudían la zona, y los dinosaurios huían entre el barro para buscar refugio, dejando profundas huellas que se petrificaron y conformaron un libro abierto que nos permite atisbar en el pasado del planeta. Ahora, ¿cómo el barro se petrificó después que pasaron esos dinosaurios? ¿Ceniza volcánica como en Pompeya, un diluvio? Ese sí que es un misterio.

No te vamos a engañar con Sousa como destino turístico. Queda lejos como el diablo, a 436 kilómetros de Joao Pessoa, pero si te apasionan los dinosaurios y quieres ver cómo los brasileños luchan para transformar esto en una fábrica turística, deberías conocerlo.

El Parque está abierto todos los días y dicen que la mejor época es de julio a diciembre. En el museo hay réplicas de huellas, mapas, maquetas y una biblioteca; luego de informarte, puedes hacer trekking por los senderos que contienen huellas, así como réplicas de algunos de los...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR