El valor del 4%
Por Jorge Rodr?ez
Presidente de Paciv
Nunca imaginaron que nos retractar?os. Hicieron inversiones de miles de millones de d?es aqu?asumiendo que honrar?os nuestra palabra.
Muchos argumentos se han planteado para racionalizar nuestra conducta:
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El primer argumento es que estas empresas for?as generan ganancias y no pagan suficientes impuestos. La creaci?e los productos de estas multinacionales requieren investigaci?desarrollo, manufactura, mercadeo, y ventas. Puerto Rico s?participa del proceso de manufactura.
Por consiguiente, las ganancias que parecen generar estas empresas en Puerto Rico no reflejan los miles de millones de d?es que ellos invierten, los riesgos que ellos asumen y los gastos que ellos tienen. Este capital es esencial para permitirles ser innovadoras y traer nuevos productos al mercado.
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El segundo argumento es que estas multinacionales reciben de Puerto Rico m?de lo que aportan y, por ende, es improbable que se relocalicen en otro pa? Esto es falso. Nada m?claro que lo sucedido con las 936 para constatarlo. La realidad es que hace 40 a?pocos sitios pod? competir con nuestra infraestructura, nuestras instituciones y nuestra mano de obra. Hoy, la ecuaci?e ha revertido, y nuestro atractivo depende mucho m?de la capacidad de honrar nuestras promesas en el trato contributivo. Todos los otros pa?s le otorgan incentivos contributivos y tasas muy reducidas.
Su aportaci?o son solo los $ 1,370 millones en impuestos que pagaron en Puerto Rico en el 2009, o los sobre 90,000 empleos que generan. Enfatizar s?en esto pierde de perspectiva el efecto domin?e sus operaciones aportan a Puerto Rico. Por ejemplo, de los $ 62,000 millones que se exportan desde aqu?m?de $ 45,000 millones se relacionan a estas industrias. Eso significa que gran parte del trabajo de transportistas terrestres y de las empresas de transportaci?e carga mar?ma, entre otras, dependen del negocio que generan estas multinacionales. Estas multinacionales crean econom? de escalas que permiten abaratar los costos de muchos otros productos que consumimos.
Aportan, adem? haciendo a nuestros profesionales puertorrique?unos de clase mundial. Los mantienen expuestos a las mejores pr?icas y las tecnolog? m?avanzadas del planeta. Tambi?sirven de puente para que nuestras empresas locales puedan exportar sus productos y servicios. Estas multinacionales nos sirven de meg?no para comunicarnos con el mundo y el mundo comunicarse con nosotros.
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El tercer argumento es que Puerto Rico...
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