Vencido el aval de los bomberos

Por Gerardo E. Alvarado León

galvarado@elnuevodia.com

Y si bien es cierto que un incidente como este puede ocurrir hasta en los lugares más seguros, también lo es que en el Hogar La Providencia, ubicado en el sector Río Plantation, las autoridades identificaron aspectos que lo hacían más vulnerable a incendios, como cables eléctricos expuestos y ventanas cubiertas por rejas.

Varias agencias regulan la operación de estos centros y otorgan -por su cuenta- los permisos correspondientes.

Eddie García, subsecretario de Familia, precisó que el Hogar La Providencia está certificado por la agencia desde el 4 de marzo de 2003, pero la última vez que lo visitó una trabajadora social fue en febrero pasado.

El Manual de Normas y Procedimientos de Servicios de Cuidado Sustituto establece que un trabajador social debe visitar un hogar sustituto -al menos- cada seis meses.

García destacó que la licencia que otorga Familia estaba al día a tono con el Reglamento de Licenciamiento de la agencia. La licencia debía vencer el 28 de agosto de 2013.

Pero el jefe del Cuerpo de Bomberos, Pedro Vázquez, confirmó que el permiso que otorga la agencia está expirado desde el pasado 17 de junio. En sus expedientes no tienen ninguna solicitud de renovación, afirmó.

La administradora del hogar, Clara García Moreno, de 63 años, aseguró que su hijo, propietario del centro, "había hecho los trámites".

Ayer, a media mañana, la procuradora de las Personas Pensionadas y de la Tercera Edad, Concepción Silva, había dicho que las licencias del centro estaban "al día" y no tenía querellas.

Familia guardó silencio cuando El Nuevo Día recabó información sobre la cantidad de centros licenciados por la agencia y de los empleados que velan por que cumplan con la ley.

Empero, Annette González, presidenta de Servidores Públicos Unidos (SPU) -gremio que agrupa a los empleados de Familia-, precisó que solo hay entre 27 y 30 oficiales de licenciamiento. Estos no solo licencian los centros de ancianos, sino también los de menores y enfermos, entre otros.

Reportes de prensa de mayo pasado dan cuenta de que en la Procuraduría de las Personas Pensionadas y de la Tercera Edad habían 724 hogares inscritos oficialmente. En octubre de 2011, un estudio realizado por la misma oficina reveló que existen alrededor de 841 centros clandestinos.

Ante estos números, los oficiales de licenciamiento se quedan cortos.

Según González, se necesitaría -al menos- el triple de empleados para llevar a cabo un mejor...

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