Verano alpino en el Tirol

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pOR IGOR GALO

La catedral barroca, dedicada a Santiago, y el Palacio Imperial situado justo detrás de la Catedral, están abiertos al visitante, y son otros atractivos de este recoleto y muy bien cuidado centro histórico. Para viajeros con más tiempo, la visita se puede completar con la visita a la Iglesia de la Corte, donde se encuentra también el Museo de cultura popular del Tirol. Todo en un espacio bastante recoleto y fácil de visitar, donde el placer es alternar visitas con café o vinos blancos en las terrazas de las callejuelas.

Quienes deseen conocer más de la historia de la ciudad y el Tirol puede visitar el museo Panorama, una pintura gigante de 1,000 metros cuadrados situada en las afueras de la ciudad, 15 minutos en autobús, que representa la batalla de 1809 entre los tiroleses y el ejército napoleónico. A su lado se encuentra otro de los atractivos de Innsbruck, el Estadio Bergisel, donde cada 3 de enero tiene lugar la famosa competición de saltos de esquí y que fue sede de dos juegos olímpicos de invierno. Diseñado por la arquitecta iraní Zaha Hadid es una visita casi obligada de la ciudad.

Como ocurre en casi todas las ciudades austriacas, ir de compras es una actividad obligatoria por la calidad y variedad de su comercio. La calle Maria-Theresia es la vía central para el shopping en Innsbruck. Aquí se encuentran los dos centros comerciales de la ciudad. Uno es el Kufthaus Tyrol, diseñado por el famoso arquitecto británico Chipperfield.

Casi enfrente se ubica el Rathous Gallerien, del también famoso arquitecto francés Dominique Perrault, que integra el ayuntamiento con una serie de comercios combinando arquitectura tradicional y moderna. Pero lo más interesante aquí son el bar 360 grados (http://www.360-grad.at/index1.php) situado en la última planta del centro comercial, y que tiene unas vistas espectaculares a todo el valle del río Inn. Abre a las 10 de la mañana y merece la pena un café, o una copa de prosecco contemplando las vistas. Por supuesto, en la noche es un lugar de encuentro de la gente guapa local.

Las compras gastronómicas son un 'must' para el visitante, sobre todo de alcoholes como los 'snaps' o los vinos austriacos, en especial el blanco. Culinarium, en la calle del casco histórico Pfarrgasse es el lugar para degustar vinos o comprarlos (http://culinarium-signor.eu/). Tiene una pequeña barra-terraza en la calle donde hacer una cata y, posteriormente, comprar las botellas que se deseen.

Muy cerca de...

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