Victoria a medias para el consumidor

Por Yalixa Rivera Cruz

yrivera@elnuevodia.com

Sin embargo, el hecho de que no se haya dado la transacción supone grandes retos para ambas empresas de cara al futuro.

ATyT anunció el lunes que desistió comprar a T-Mobile, una transacción valorada en $ 39,000 millones.

Al no darse la compra, por un lado, ATyT se queda sin la posibilidad inmediata de aumentar su capacidad de espectro, a modo de satisfacer la creciente demanda de ancho de banda.

Esto por un lado representa un obstáculo en sus proyecciones de ampliar la cobertura 4G con su red LTE (Long Term Evolution) en Estados Unidos.

En la medida en que el tráfico de datos siga aumentando, si ATyT no consigue incrementar su capacidad (espectro) se verá obligada a aumentar los precios.

Mientras, ATyT coge un cantazo con la penalidad de $ 4,000 millones que tendrá que pagar a T-Mobile por retirar su oferta.

El Nuevo Día contactó a ATyT a nivel local para una reacción pero no ofrecieron comentarios.

Mientras que para T-Mobile significa un cambio en estrategia importante ya que su empresa matriz, la alemana Deutsche Telecom, había expresado su complacencia ante la oferta de ATyT, porque sus intenciones de salir del mercado americano estaban claras.

La presidenta de la Junta Reglamentadora de Telecomunicaciones de Puerto Rico (JRT), Sandra Torres, alabó la decisión de ATyT de no adquirir a T-Mobile amparándose en los derechos y beneficios de los consumidores.

"Entiendo que fue una decisión muy sabia. Ciertamente, desde un principio nosotros habíamos expresado nuestro reparo por el control que hubiera tenido ATyT en Puerto Rico si se le hubiera permitido adquirir a T-Mobile", explicó Torres.

"En la medida que haya más competencia los precios se mantienen y la calidad de los servicios también mejora", detalló la portavoz de la JRT, entidad local encargada de fiscalizar a la industria de telecomunicaciones.

Aunque la paralización de la fusión no cambia la situación actual de los consumidores, si propone cambios importantes para estas proveedoras que deberán buscar otras alternativas para mantenerse competitivos, agregó Torres.

Desde que ATyT, en marzo pasado, hizo públicas sus intenciones de adquirir T-Mobile estableció como razón primordial la oportunidad de hacerse de una cantidad mayor de espectro para cumplir efectivamente con sus planes de lanzar LTE en todo Estados Unidos.

Durante el proceso, que duró poco menos de un año, las intenciones comerciales de ATyT se vieron empañadas por la tenaz...

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