Vital reconstruir viviendas más resistentes a desastres
Las ráfagas del huracán María hicieron volar techos de aluminio y cinc, mientras que las inundaciones y fuertes lluvias dañaron paredes de madera y provocaron filtraciones hasta en techos y muros de concreto.
Después de la tempestad no viene la calma, sino los esfuerzos para reconstruir viviendas que quedaron maltrechas o resultaron completamente destrozadas. Esos esfuerzos, en la medida de lo posible, deben estar dirigidos a que las residencias, una vez reconstruidas, sean más resistentes a desastres naturales.
De acuerdo con Pablo Vázquez Ruiz, presidente del Colegio de Ingenieros y Agrimensores de Puerto Rico, “en caso de que la residencia sufra daños, lo primero que hay que mirar es que el ciudadano debe tener acceso a ayudas porque tiene seguro de ‘hazard’ o de inundaciones, y lo más importante es demostrar los daños que sufrieron esas estructuras”.
Por eso, el consumidor debe tomar fotografías de los daños que sufrió la estructura como consecuencia del ciclón, las inundaciones o los deslizamientos de terrenos, pues le servirá como evidencia a la hora de hacer la reclamación al seguro “hazard” (que cubre daños por fuego, huracán y terremoto), al seguro contra inundaciones (que también puede cubrir derrumbes) o a la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés). Si paga el seguro como parte de su hipoteca y tiene dudas acerca de con qué aseguradora tiene su póliza, debe comunicarse con la institución hipotecaria.
“El ciudadano debe hacer la gestión correcta que requiera el banco, el seguro o FEMA”, apuntó el ingeniero. “Eso es lo fundamental, pues van a necesitar esa ayuda económica para levantarse de esto”.
Al iniciar los trabajos de reconstrucción o rehabilitación de la vivienda, Vázquez recomendó contactar a un profesional de la ingeniería civil o la arquitectura, de modo que el diseño y la labor se realicen conforme a los códigos de construcción vigentes.
“Hemos advertido acerca del serio problema que tenemos con el clandestinaje y la falta de permisos en la construcción”, dijo Vázquez. “Muchas personas, por tratar de economizar, no reclutan al profesional técnico capacitado para diseñar y proveer una vivienda resiliente”.
Al intentar construir por sí mismos o recurrir a personas sin el peritaje adecuado, los ciudadanos pueden terminar en estructuras que probablemente no resistan el embate del próximo huracán o inundación, advirtió Vázquez. “Es importante consultar a un profesional para dirigir la...
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