Viva la idea de su expansión

El municipio de Arecibo ausculta alternativas para el manejo de su vertedero luego de que el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) rechazara una propuesta para extender la vida útil del sistema de relleno sanitario por cerca de una década, petición que recibió el repudio de una organización comunitaria que promueve el cierre expedito de la instalación.Carlos López Freytes, asesor ambiental del alcalde Carlos "Tito" Ramírez, sostuvo que la idea de expandir verticalmente el vertedero fue malinterpretada tanto por vecinos de los sectores Factor 2, Garrochales y Cercadillo, que favorecen el cierre, como por el DRNA, al plantear que las medidas de ingeniería habrían tenido múltiples beneficios relacionados al control de escorrentías y lixiviados."El propósito principal no era solamente alargar la vida útil del vertedero, sino tomar medidas ambientalmente más beneficiosas para un mejor cierre. En la manera que se hubiesen podido establecer medidas como paredes verticales dentro del mismo vertedero -por lo que realmente no habría una expansión-, una de las cosas que hubiese permitido eran medidas de control ambiental mejores que las que existen", dijo López Freytes.Por años, líderes de las comunidades -que se estima están compuestas por sobre 10,000 personas- han reclamado que se acelere el cierre para evitar la contaminación de ecosistemas como el caño Tiburones, además de la pestilencia que, aseguran, es la causa de la prevalencia de enfermedades respiratorias y distintos tipos de cáncer entre la población.López Freytes, expresidente de la Junta de Calidad Ambiental, indicó que el vertedero de Arecibo se construyó previo a la aprobación del Resource Conservation and Recovery Act (RCRA), una ley federal de 1976 que instituyó requerimientos para los sistemas de relleno sanitario, tales como el uso de revestimientos que ayudan a controlar el flujo de lixiviados o aguas de escorrentías.La expansión vertical del vertedero, dijo el abogado, se habría logrado a través de métodos para compactar los desperdicios ya depositados.Las medidas propuestas hubieran evitado la contaminación "que tendría un vertedero tradicional en un proceso tradicional de cierre, donde no hay ‘liner’ (revestimiento) por debajo para controlar la generación de lixiviados. El beneficio de la alternativa era dual. El municipio podría beneficiarse por un tiempo más de operación y tomaba muchas mejores medidas de control", resumió López Freytes.El cierre del...

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