Vivienda local bajo fuego de HUD
Por Joanisabel González
joanisabel.gonzalez@elnuevodia.com
También tendrá que dar cuentas por otros $ 18.7 millones por ingresos de los que no se sabe su paradero e identificar el uso de otros $ 50.3 millones que se alega no utilizó adecuadamente.
Tales deficiencias engloban una lista de señalamientos de la Oficina del Inspector General del Departamento de la Vivienda federal (HUD-OIG, por sus siglas en inglés) en torno al funcionamiento de la Administración de Vivienda Pública (AVP) y su programa de financiamiento, que aparecen en un extenso informe de auditoría de septiembre del 2009.
Las deficiencias se habrían dado, según la auditoría, bajo las administraciones de los exgobernadores Sila M. Calderón, Aníbal Acevedo Vilá y del actual incumbente Luis Fortuño.
Esa dependencia federal también alega que la AVP no supervisa adecuadamente los proyectos a su cargo lo que propició que estos se retrasaran más de lo debido; que en los libros contables de esa agencia no se registran las transacciones que se efectúan y que ni siquiera se concilian los estados de cuenta donde se depositan sus fondos.
Antes de salir de su cargo, en el 2009, el exsecretario de la Vivienda local, Yesef Cordero, rechazó los hallazgos. Señaló que las acciones de su agencia fueron adecuadas y prudentes y que muchas contaron con la aprobación de HUD. Asimismo, Cordero alegó que la HUD-OIG "no entendía plenamente" la estructura financiera y los requisitos legales de la transacción que hizo la AVP, lo que llevó a conclusiones erróneas.
Empero, la HUD-OIG se reafirmó en todos sus hallazgos y recomendó recuperar los fondos y modificar los procedimientos internos, así como de supervisión de los proyectos de rehabilitación para llevarlos a término.
La AVP es el segunda agencia más grande de todo Estados Unidos, porque administra más de 56,000 unidades de vivienda en la Isla. Gestiona aproximadamente $ 1,300 millones en fondos y como parte del plan ARRA recibió unos $ 174 millones.
Para financiar parte de su operación, la AVP emite bonos para levantar fondos que se utilizan particularmente en la remodelación de residenciales públicos. En la auditoría, se examinan dos emisiones de bonos, en el 2003 y luego, en el 2008. Al obtener esos fondos, estos se depositan en ciertas cuentas y se reciben intereses por ellos.
Según la HUD-OIG, en el 2003, la AVP solicitó con éxito el aval de HUD para emitir unos $ 693 millones en deuda, lo que permitiría remodelar 8,256 unidades de vivienda.
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