Vivo su legado a través de sus hijos

Cuando sorpresivamente su esposo murió en el 2008, para Noris Arroyo fue impensable regresar a laborar en el negocio familiar. Una actividad dedicada a la cría de ganado y producción de carne fresca, que ambos habían levantado exitosamente por los pasados 30 años.

Arroyo contó que por los subsiguientes dos años, no tuvo cabeza para pensar en llevar las riendas de Ganaderos Borges, una empresa que posee 25 fincas para la crianza y ceba de ganado y de cerdos, en el área sureste de la Isla. que abarca los pueblos de Arroyo, Gurabo, Humacao, Maunabo, Guayama y Naguabo. Así pues, sumida en su propio vía crucis, delegó en sus cuatro hijos la tarea de correr el negocio familiar.

Una tarea que, según dijo, no era del todo ajena para su prole ya que gran parte del proceso de crianza que tanto ella como su esposo procuraron inculcarle a sus hijos fue el amor por el trabajo y el negocio familiar.

“Yo siempre le decía a mi esposo que era importante enseñarles a ellos que del trabajo que teníamos era que salían los beneficios de tener unos buenos zapatos o de tener un four track para recorrer la finca. Que se trata de un trabajo muy sacrificado pero del que se pueden obtener sus recompensas”, expresó la mujer empresaria, que en la actualidad comparte las labores de dirección de Ganaderos Borges con sus hijos.

Contó que bajo esta filosofía se ocupó de que desde pequeños, tanto los dos varones como las dos hembras estuvieran siempre con ellos y al tanto de lo que era el trabajo de la crianza de reces y la agricultura.

“En medio de todo lo doloroso que fue todo ese proceso del fallecimiento de mi esposo, pienso que si no lo hubiésemos hecho así yo sola no hubiera podido manejar la empresa”, añadió.

Hoy día cada uno de sus cuatro hijos se encarga de una parte del negocio. Su hijo mayor César Pablo Borges lidera todo lo que es la planta de distribución y la operación del matadero, así como las tareas de mercadeo de la empresa. Mientras que su hija Carla tiene a su cargo la contabilidad del negocio. En cambio Michelle, tiene a su cargo la operación de la subsidiaria de la compañía “Riquezas de mi tierra” bajo la cual se siembra, produce y venden productos agrícolas como recao y cilantrillo. Por último, el hijo menor César Joel es el que maneja todo lo que tiene que ver con la crianza de ganado y la siembra de plátano.

Según Arroyo, natural de San Lorenzo, ha sido un proceso de aprendizaje para todos porque cada uno en su área está aprendiendo a correr un...

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