'Hay que volver a nacer'

Beatriz Figueroa

Guaynabo

Estuve leyendo la sección "Los más buscados", de El Nuevo Día, en la edición del domingo 8 de diciembre. En la misma reseñaron el crimen del comerciante Antonio Nieves Ruiz, asesinado en mayo pasado en Comerío.

Según la noticia, presuntamente un hombre contrató a un matón a sueldo para quitarle la vida al comerciante porque supuestamente salía con su esposa, de la que estaba separado.

De la noticia me llamó la atención el siguiente párrafo: "Eso no fue robo. Fue pasional. Lo mandaron a matar porque él andaba con una mujer equivocada. La pareja de esa mujer, aunque estaban separados, mandó a matar al comerciante porque ella tenía una relación allá y acá", apuntó el agente Luis Colón, de la División de Homicidios de Aibonito.

Es increíble cómo un agente del orden público se expresa de ese modo. ¿Hasta cuándo?

Este policía repartió culpas. Se olvidó de que aquí hay una víctima y un victimario y sin importarle nada echó culpas a la víctima. Y, claro...

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