Votaré que no

ENRIQUE TOLEDO

DIRECTOR DE SOCIEDAD SINERGIA

¿Cómo es que al pueblo de Puerto Rico le han puesto a votar por una condición política en donde otro país le impone sus leyes, guerras y formas de vida sin su participación? ¿Y cómo es que está a punto de así consentirlo?

En primer lugar, l Gobierno federal niega totalmente que Puerto Rico sea su colonia. Somos "su" territorio no incorporado y, dado que dicho gobierno se piensa a sí mismo como la fuente única de "libertad" y el "bienestar", razona que en tal condición nos extiende sus "libertades" y "bienestares". El Gobierno federal representa a Puerto Rico como innatamente carente de "libertad" y "bienestar" porque somos "the people of Porto Rico", no "the People of United States". En esa lógica imperial se enmarca el plebiscito del 6 de noviembre en el que se reduce a Puerto Rico a un pueblo-territorio sin derecho a la autodeterminación e independencia. Recordemos que el Gobierno federal considera nuestro derecho como privilegio cuando exige de su autorización.

En segundo lugar, las lógicas partidistas legitiman el poder colonial del Gobierno federal sobre Puerto Rico. Fue el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP) el que propuso este plebiscito (que emana del Informe Bush del 2005) bajo su lógica de la independencia por "default". Ésta presume que el puertorriqueño es incapaz de inquirir por su propia "libertad" (o la independencia estatal) y que el Gobierno federal no le dará su forma de "libertad" (la estadidad). Por tanto, hay que "emboscar" al Gobierno federal con tal de que "libere" al puertorriqueño (¡¿de sí mismo?!). El PIP renunció hace tiempo al pueblo ante su incapacidad de entender las mentalidades del puertorriqueño. Su trabajo político dejó de ser el re-fortalecimiento de la soberanía de Puerto Rico para implícitamente legitimar el poder colonial del Gobierno federal sobre el archipiélago.

El Partido Nuevo Progresista (PNP) fue el que aprobó este plebiscito bajo otra lógica. Lo hizo, más que nada, para asegurarse votos que garanticen su reelección en la administración del territorio no incorporado ante la debilidad de su candidato. Pero también para fragmentar a su némesis electoral, el Partido Popular Democrático (PPD), aprovechando sus profundas incongruencias históricas (¿unión permanente o soberanía?). Ante esta situación, y dentro de su propio...

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