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Por la calle de la amargura

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Vincent

Por Lilliam Irizarry

lilliam.Irizarry@gfrmedia.com

Y es que, para llegar a ese y otros destinos, debe sortear una ristra de vehículos que se estacionan sobre la acera por donde ella necesita pasar con su andador.

"Me tengo que tirar a la calle porque no hay ni un huequito en la acera por donde pasar. Ya dos veces me he caído. A uno le gusta ir personalmente a comprar sus cositas, pero a veces prefiero ni salir", sostiene la mujer que se lanza al recorrido suicida cuando no tiene dinero para que otra persona le haga el manda'o, que dice le "sale más caro que el café y el cantito de pan".

Si quiere entender mejor lo que vive Doña Emma, bájese del carro y camine un rato por la ciudad. ¿Le incomodan esos automóviles y esa basura que obstruyen su paso en las aceras, esos semáforos que le obligan a correr para poder cruzar al otro lado, esos largos trechos sin un lugar donde sentarse a descansar un minuto, esos conductores impacientes que le tiran el carro encima?

Pues ahora imagine cómo se sienten los miles de ancianos que, con un bastón, andador o silla de ruedas como único medio de transporte, tienen el valor de lanzarse todos los días a la calle para hacerle frente a la violación de sus derechos más elementales de movilidad y libertad, establecidos en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, y en otros pactos, tratados y declaraciones internacionales.

Para la sicóloga clínica Mercedes Rivera, entorpecer el recorrido que hace Doña Emma hasta la panadería es negarle el encuentro con la gente de su barrio, con el alma de su comunidad. "No sé si es una violación en términos de derechos humanos, pero de seguro lo es en términos de justicia social", señala.

Obstaculizar la movilidad de los ancianos -añade- puede llevarlos al aislamiento y a la pérdida de destrezas sociales, por lo que corresponde a ciudadanos de todas las edades respetar y rescatar los espacios peatonales en beneficio de toda la comunidad.

Puerto Rico ya cuenta con una Ley de Calles Completas, que establece como política pública el desarrollo de vías que propicien la actividad humana y faciliten el acceso igual a peatones de todas las edades y condiciones, ciclistas y transportes. La exposición de motivos de esa ley señala la necesidad de evitar el aislamiento y promover la actividad fisica en la comunidad, especialmente entre los adultos de edad mayor. "Ante la dificultad de movilidad en la comunidad, muchas...

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