Consternación por joven baleado

Por Daniel Rivera Vargas

drivera2@elnuevodia.com

Stephano Cornelis Steenbakkers Betancourt, de 17 años, estudiante de Baldwin School y vecino de Guaynabo, permanecía ayer tarde en condición crítica tras ser baleado la noche del domingo en Dorado, cuando salía de visitar familiares en una guagua Lexus.

El cónsul de Holanda, Robert Jan van Hartingsveldt, dijo que Steenbakkers Betancourt es hijo de un ciudadano de ese país, un comerciante de nombre Eric Steenbakers, y que el joven, criado en la Isla, tenía planificado mudarse a Holanda el primero de julio con su padre para terminar sus estudios de escuela superior.

"Es un muchacho talentoso, buena gente, no le haría daño ni a una mosca. Es una tragedia, algo desafortunado", dijo Hartingsveldt.

No fue posible contactar a sus familiares ya que los del lado materno se encontraban con el joven dentro del hospital, mientras que el padre viajaba ayer desde Holanda para estar al lado de su hijo en estos momentos críticos. Debía llegar anoche a la Isla.

El caso ha consternado a quienes lo conocen y que ya habían organizado sangrías y misas.

Ayer muchos de ellos -varios entre sollozos- se arremolinaban en el vestíbulo del Pediátrico para saber sobre la condición del joven.

"Su familia es noble, honorable. Esto ha sido un abuso, no puedo creerlo. Las fiestas eran en su casa, un muchacho que no bebía, un muchacho bueno, bueno", dijo Samuel Gotay, amigo de la familia. "No le haría nada a nadie".

Gotay describió a los padres de Steenbakkers Betancourt como comerciantes muy pendientes a sus hijos. "Yo no creo en la pena de muerte, pero si (los responsables) son procesados, enjuiciados y encontrados...

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