Orgía de ángeles: Víctor Fragoso

Por Lilliana Ramos Collado

Conocí a Víctor Fragoso en Nueva York a comienzos de 1981. Ya había leído sus dos libros, El reino de la espiga (1974) y Ser islas/Being Islands (1976) y descubierto un adelantado puertorriqueño en la poesía "gay" (hoy "LGBTT"). Nuestros 1970s fueron momento de cambio drástico en formas y contenidos, y a ese cambio perteneció la poesía de Fragoso.

Valiente y abierta, violenta y acariciante, la poesía de Fragoso es la paradoja que encierra su propio verso: "orgía de ángeles". Hundido su cuerpo en la metrópolis neoyorquina, el poeta asume como suya la empresa de la libertad, y no sólo desde una sexualidad prohibida entonces en nuestra isla, sino desde una conciencia política que reúne a la vez la vivencia aguda del inmigrante empujado hacia el margen de una comunidad racista, y la convicción de forjar una patria libre.

En sus poemas, Fragoso funde, pues, diversas voluntades libertarias, y desde su afán afirma una y otra vez que unas libertades van con las otras. El impulso de un individuo en busca de su propia libertad empujará a otros por similar camino en un contagio que avanzará del yo al nosotros. No debe sorprendernos que uno de los epígrafes de su primer libro pertenezca a Walt Whitman: "I celebrate and sing myself / and what I assume you shall assume / for every atom belonging to me as good belongs to you." Cada cuerpo es multitud.

Este ánimo celebratorio de Fragoso, tan whitmaniano, precisamente transforma la libertad en una fiesta, abrazo comunitario que advierte que la libertad individual es apenas parcial sin esa libertad compartida que funda vínculos trans-subjetivos. No hay nada verdaderamente íntimo en la vida del individuo: es el colectivo el garante de la libertad de cada cual. La pareja misma es su unidad mínima, y el lecho es la isla afortunada donde se engendran los nuevos paradigmas sociales.

Es la palabra "isla" la que se va enriqueciendo como símbolo primordial en la poesía de Fragoso, la isla que ha perdido su aislamiento: el cuerpo-isla, la casa-isla, la...

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