Pierson Muller V. Feijoo, 1978, 106 D.P.R. 939
| Autor | Dra. Ruth E. Ortega Vélez |
| Páginas | 240-241 |
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El Empleo Público y el Debido Proceso de Ley.
Hechos: Alegando ser Empleado de Carrera por determinación de la anterior directora de la Oficina Central de Administración de Personal y por la naturaleza de su cargo, el 6 de mayo de 1977, Terence D. Pierson Muller apeló ante la Junta de Apelaciones del Sistema de Administración de Personal, solicitando reposesión, con pago de los haberes dejados de recibir, contra la decisión de cesantía del 14 de abril de 1977 del actual director de dicha Oficina Central José Roberto Feijoó. Previa prórroga y trámites al efecto, se fijó la vista administrativa para el 7 de septiembre de 1977.
El 4 de agosto, Pierson radicó ante el Tribunal Superior una petición de injunction alegando esencialmente los mismos hechos expuestos en la apelación administrativa pendiente. El 18 de dicho mes formuló ante la Junta una moción de desistimiento sin perjuicio, a la cual se opuso la parte apelada. Luego de una vista sobre el particular, la Junta denegó el desistimiento solicitado, señalando la vista administrativa en su fondo para el 30 de septiembre de 1977. Contra dicha resolución interlocutoria administrativa, el apelante no solicitó reconsideración ni acudió al foro judicial.
Feijoó solicitó la desestimación de la acción judicial de injunction, a lo cual el tribunal se negó; acudió ante el Tribunal Supremo.
Controversia: Si a la J.A.S.A.P. le corresponde la jurisdicción primaria. Decisión del Tribunal Supremo: Revoca la Resolución del Tribunal Superior, y en su lugar desestima la acción judicial interpuesta.
Fundamentos legales: En Otero Martínez v. Gobernador, 1977, 106 D.P.R. 552, el Tribunal Supremo resolvió que la reclamación de los empleados limitada a un cambio en la clasificación, no revestía ni la urgencia ni la intensidad que ameritasen eludir el cauce administrativo. Según expuso el Tribunal, el
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injunction de Derechos Civiles no está supeditado a normas de jurisdicción primaria ni agotamiento de la vía administrativa.
En este caso, el Tribunal reitera la regla general de que, salvo circunstancias excepcionales, no presentes en el caso de autos, todo litigante debe...
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