Por rutas opuestas

Por Alberto C. Medina Gil

alberto.medina@elnuevodia.com

Cuando los Nuggets de Denver cambiaron a Carmelo Anthony por cuatro jugadores que, todos juntos, no tienen el nivel de talento de Anthony, y tres selecciones en el sorteo de novatos, parecían un combinado que sacrificaba el presente por mejores posibilidades de competir en el futuro. Luego de poco más de un mes desde ocurrido el canje, la historia ha sido completamente distinta.

Los Knicks, que tenían récord positivo de 28-26 antes de que llegara Carmelo, llegaron al juego de anoche ante el Magic de Orlando con foja de 7-12 desde el cambio y una racha de seis derrotas, cayendo al tercer lugar en su división y séptimo en la conferencia. Entre sus reveses desde la llegada de Carmelo, hay algunos humillantes. Han perdido cuatro veces ante equipos sotaneros, incluyendo dos derrotas contra el peor equipo de la NBA, los Cavaliers.

Para Denver ha sido todo lo opuesto. En 16 partidos sin Anthony, los Nuggets han jugado para marca de 12-4, se han colocado firmemente en el quinto puesto de su conferencia y han logrado triunfos inesperados contra Boston y San Antonio.

¿Cómo es posible que el equipo que perdió a uno de los 10 mejores baloncelistas en la liga esté jugando mejor que el equipo que ahora lo tiene?

En el caso de los Knicks, no es muy difícil diagnosticar el mal que los acecha. Nueva York ya era un equipo malo defensivamente antes que se integrara Anthony, cuyas deficiencias de ese lado de la cancha están bien documentadas. Desde su llegada, los Knicks han sido pésimos; han permitido 100 puntos o más en 12 de sus 19 juegos con Carmelo, y 115 o más en cinco de ellos. Esa deficiencia defensiva ha sido mortal para los Knicks; por más explosivo que sea a la ofensiva el dúo de Anthony y Amare Stoudemire. A los Knicks se le ha hecho imposible igualar la producción ofensiva que están permitiendo del otro lado de la cancha.

Por otra parte, sin Anthony, los Nuggets han mejorado drásticamente a la defensiva; luego de permitir cerca de 105 puntos por juego a lo largo de la...

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