Las presunciones de maternidad y de paternidad y su impugnación
| Autor | Ruth E. Ortega-Vélez |
| Páginas | 464-485 |
Código Civil –LIBRO SEGUNDO– Las Instituciones Familiares
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b. La prueba DNA o Ácido Dexoxiribonucleico:
Las pruebas utilizadas tradicionalmente en los pleitos de filiación (ABO, MNSs,
Rh y HLA) interpretan marcadores genéticos químicos que son expresiones del
material genético. Estos marcadores, señala el Tribunal Supremo en Rivera v.
León, son productos celulares, principalmente proteínas que están presentes en
203
las membranas de las células rojas y blancas de la sangre. Contrastando con estas
pruebas tradicionales, las del DNA estudian directamente el propio material
genético.
El DNA o Acido Dexoxiribonucleico es el código genético de todo ser humano.
Excepto en el caso de gemelos idénticos, cada individuo posee un código genético
único — DNA— el cual se encuentra en cada cromosoma de cada célula del
cuerpo humano. La sangre, el semen, la piel y el cabello permiten la identificación
de la persona a través del DNA.
Citando los escritos del doctor Ángel Rodríguez Trinidad (1985: 14), el Tribunal
Supremo explica que, la prueba DNA es una prueba de exclusión al igual que otras
pruebas que se utilizan para fines de filiación. En comparación con el 95% que se
logra con otras pruebas, la DNA refleja un 99% de exclusión, que puede aumentar
si la prueba de DNA se utiliza en combinación con otras pruebas como la HLA.
En los procesos judiciales de filiación, cada día se utiliza más la prueba de
DNA. Esta, a menudo permite establecer relaciones biológicas que no son
exclusivamente de paternidad. Por ejemplo, podría determinarse la probabilidad
de que un alegado hijo de un presunto padre fallecido, sea hermano o medio
hermano de otro hijo de este.
CAPÍTULO III.
LAS PRESUNCIONES
DE MATERNIDAD Y DE PATERNIDAD
Y SU IMPUGNACIÓN
Introducción: Los antecedentes para entender la infertilidad y la reproducción
humana han avanzado a un ritmo acelerado hasta el presente. Como antecedentes
históricos remotos, que describen la maternidad suplente, se citan el libro del
Génesis 16 y 30. En el Génesis 16, encontramos:
204
1 Y SARAI, mujer de Abram no le paría: y ella tenía una sierva egipcia, que se
llamaba Agar.
2 Dijo, pues, Sarai a Abram: Ya ves que Jehová me ha hecho estéril: ruégote
que entres a mi sierva; quizá tendré hijos de ella. Y atendió Abram al dicho de Sarai.
3 Y Sarai, mujer de Abram, tomó a Agar su sierva egipcia, al cabo de diez años
1995, 138 DPR839.
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Génesis es el primer libro de la Torá o Pentateuco y, por tanto, también es el primer libro
204
del Tanaj judío y del Antiguo Testamento de la Biblia cristiana.
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que había habitado Abram en la tierra de Canaán, y dióla a Abram su marido por
mujer.
4 Y él cohabitó con Agar, la cual concibió: y cuando vió que había concebido,
miraba con desprecio a su señora.
5 Entonces Sarai dijo a Abram: Mi afrenta sea sobre ti: yo puse mi sierva en tu
seno, y viéndose embarazada, me mira con desprecio; juzgue Jehová entre mí y ti.
6 Y respondió Abram á Sarai: He ahí tu sierva en tu mano, haz con ella lo que
bien te pareciere. Y como Sarai la afligiese, huyóse de su presencia.
El Capítulo 30 del Génesis nos muestra:
1Viendo Raquel que no daba hijos a Jacob, tuvo envidia de su hermana, y decía
a Jacob: Dame hijos, o si no, me muero.
2 Y Jacob se enojó contra Raquel, y dijo: ¿Soy yo acaso Dios, que te impidió
el fruto de tu vientre?
3 Y ella dijo: He aquí mi sierva Bilha; llégate a ella, y dará a luz sobre mis
rodillas, y yo también tendré hijos de ella. 4 Así le dio a Bilha su sierva por mujer;
y Jacob se llegó a ella.
5 Y concibió Bilha, y dio a luz un hijo a Jacob.
6 Dijo entonces Raquel: Me juzgó Dios, y también oyó mi voz, y me dio un
hijo. Por tanto llamó su nombre Dan.
7 Concibió otra vez Bilha la sierva de Raquel, y dio a luz un segundo hijo a
Jacob.
En tiempos de Aristóteles se creía que el feto se formaba dentro de la mujer, se
mantenía pequeño y crecía una vez se rompía el cascarón. Para 1600 d. C., los
científicos anticipaban la teoría de reproducción señalando que la mujer produce
óvulos y que después de la unión del óvulo con el espermatozoide, el embrión
crecía gradualmente. Rainier de Graaf, científico holandés, describió dicho
proceso, pero erró en un aspecto: pensó que similar a un huevo de ave hervido, el
óvulo humano se componía de una masa blanca que llenaba todo el ovario.
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Para Áurea Violeta Guzmán este, ni es un descubrimiento reciente, ni constituye
el “avance tecnológico del siglo” pues ya estos se conocían entre las tribus antiguas
árabes con el propósito de mejorar la raza de sus caballos”.
206
Para fines del siglo XIX, señala Eduardo Zannoni, se venían realizando diversas
investigaciones sobre la ectogénesis en conejos, ratas, etc. Gregory Goodwin
207
Fincus (1903-1967), un notable zoólogo británico, hacia fines de la década de 1930
logró la activación artificial de un óvulo no fecundado de una coneja y el primer
parto de un conejo vivo sin padre. Las investigaciones de este científico
prosiguieron en el área de la biosíntesis de las hormonas suprarrenales. Al obtener
Andrea L. Bonnicksen, In vitro fertilization (New York: Columbia Univ. Press, 1987) 12.
205
Áurea Violeta Guzmán, “La inseminación Artificial, ¿materia de conciencia o de de re-
206
cho?”. XIV Rev. Jur. UIAPR 1, Sept-Dic 1979: 67.
La ectogénesis es la producción de un individuo o un ser humano autónomo fuera de l
207
útero de una mujer: en un laboratorio.
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